La capacidad para escuchar de los niños tarda en desarrollarse. Escuchar no es sólo oír (aunque también puede ser necesario revisar que el niño no tenga dificultades auditivas). Escuchar se refiere a cómo el cerebro interpreta la información. Los niños tienen que ser capaces de seguir instrucciones y trabajar con otros. Es importante ser realista. A los niños pequeños les puede resultar difícil seguir una instrucción, sobre todo si es algo nuevo o algo que prefieren no hacer (por ejemplo, ordenar sus juguetes). También deben ser capaces de comunicar sus propias emociones e ideas de forma socialmente adecuada. Hay formas positivas para enseñarle a los niños a que aprendan a escuchar, comunicarse y cooperar mejor.
                            La capacidad de escuchar y llevarse bien con los demás es una habilidad
                            importante que deben aprender los niños. Cuando los niños tienen dificultades
                            para escuchar, seguir instrucciones y ser cooperativos, también pueden tener
                            problemas en la escuela, con las amistades y en la vida en general. Pero con un
                            apoyo cariñoso, positivo y consistente, los niños y adolescentes pueden mejorar
                            su capacidad para escuchar, seguir instrucciones y desarrollar las habilidades
                            que necesitan para tener éxito.
                            
                            Lea el blog sobre este tema de actualidad:
                            El escuchar y colaborar son habilidades que toman tiempo para desarrollarse
                        
                            La mayoría de los niños necesitan mucha práctica y estímulo para saber escuchar,
                            prestar atención, seguir instrucciones y aprender nuevos comportamientos. A
                            veces los niños pueden sentirse cansados, hambrientos o incómodos. También
                            pueden querer averiguar qué pasa si hacen o dicen algo de manera diferente. O
                            reaccionan de cierta manera debido a algo que experimentaron antes. O tal vez
                            sólo necesitan más tiempo para procesar lo que se les dice. El momento en que
                            se dan las instrucciones también es importante.
                            
                            La mayoría de los niños pequeños de vez en cuando son desafiantes. Esto sólo es
                            un problema si ocurre con regularidad. Por ejemplo, si su hijo sigue menos de
                            la mitad de las instrucciones, especialmente si hace lo contrario de lo que
                            usted le pide, es argumentativo o exigente.
                        
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