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Estimular la autoestima: Cómo fomentar la confianza en niños, niñas y adolescentes

Muchas madres, padres y cuidadores quieren saber cómo fomentar la confianza en los niños, niñas y adolescentes. Después de todo, la confianza es un superpoder.

Les ayuda a disfrutar de los desafíos, tomar riesgos razonables, intentar cosas nuevas y adaptarse mejor a la vida escolar.

No se trata de sentirse mejor que los demás, sino de tener una creencia interna que diga: “Yo puedo hacerlo”, aun cuando parezca difícil.

Las investigaciones recientes muestran que una autoestima alta está relacionada con muchas cosas positivas, como mejores relaciones sociales, más éxito escolar y laboral, y mejor salud mental y física. También puede atenuar la ansiedad social y el rechazo escolar.

Sin duda, sentir confianza puede ser desafiante. Conforme los niños crecen y se desarrollan, sus niveles de confianza varían y son diferentes para cada uno. Algunos van a sentirse listos para hacerle frente al mundo, mientras que otros necesitan de más apoyo y motivación.

Las madres, padres y cuidadores tienen un papel clave en ayudar a los niños, niñas y adolescentes a desarrollar su confianza. Aquí algunos consejos que pueden ser útiles.

Cómo mejorar la autoconfianza de niños, niñas y adolescentes: elogiando sus esfuerzos

Quienes reciben elogios y motivación por sus esfuerzos, y no sólo por sus logros, se sienten bien consigo mismos.

Conversa sobre las cosas que tu hijo/a hace bien. Cuando tengas que hablar sobre las áreas en las que puede mejorar, empieza por mencionar algo positivo.

Por ejemplo, ¡Realmente estás entendiendo mejor la tarea! Practiquemos juntos lo más difícil, ¿te parece?

Bríndale elogios por su progreso, sin importar el resultado. Esto le motivará a seguir intentando cuando las cosas parezcan difíciles.

Cultiva la confianza en los niños, niñas y adolescentes: conviértete en un modelo positivo

Tal vez tu hijo/a está preocupado/a de ir a la escuela. Podría parecerle dificultoso hacer amigos o darse por vencido cuando siente que las cosas son difíciles.

Los niños, niñas y adolescentes aprenden mucho simplemente observando cómo tú manejas los sentimientos incómodos y los desafíos.

Permíteles que vean de qué modo manejas y te sobrepones a los contratiempos.

Conversa con ellos sobre cómo un problema puede dividirse en pequeños pasos que pueden trabajarse uno a la vez.

Comparte historias sobre cómo superaste un desafío, lo que hiciste y cómo te sentiste antes y después. Admite tus propios errores y frustraciones.

Y cuando las cosas no salgan como lo habías planeado, trata de responder tranquilamente.

Fomenta la autoconfianza: motívalos a resolver los problemas

Puede ser tentador intervenir y tratar de arreglar cada uno de los problemas de nuestros niños y adolescentes. Pero entonces ellos pierden la oportunidad de aumentar su confianza.

Al contrario, trata de ver si es que pueden encontrar la solución por sí mismos. Podría sorprenderte lo que ocurre cuando paras y, por un momento, das un paso atrás.

Guíalos a través de los pasos para resolver los problemas haciéndoles preguntas como: “¿Qué has intentado hasta ahora?” o “¿Qué piensas que puede pasar si intentas esto?”.

Mi hijo/a se da por vencido/a fácilmente: tomando las cosas un paso a la vez

“¡No puedo hacerlo!”

“¡Me rindo!”

Dividir las cosas en pasos más pequeños puede ayudar.

Por ejemplo, cuando ellos se sientan abrumados por algún proyecto escolar, puedes hacerles preguntas como: “¿Qué es la primera cosa que tienes que hacer?” o “¿Cuál es el siguiente paso?”.

Si tienes niños más chicos, divide las tareas del tipo guardar los juguetes en pasos más pequeños, como: “Bien, empecemos levantando los bloques juntos”.

Esto les ayuda a trabajar con las cosas que parecen enormes e imposibles de una manera más manejable.

Las señales de niños, niñas y adolescentes con confianza: hacer cosas por sí mismos

Muestra confianza en las habilidades de tu hijo/a permitiéndole que haga las cosas sin ayuda ni guía, en cuanto esté listo/a para hacerlo. Esto le ayudará a aprender que puede lograrlo y que tiene un poco de control sobre su mundo.

Permitir que tome riesgos razonables le permite saber que crees en su potencial.

Involucrarlo en las decisiones puede ayudarle a sentir que su opinión es valiosa. Por ejemplo, tengan una reunión familiar donde todos puedan escoger qué actividad hacer el fin de semana o votar por una nueva regla familiar.

Motívales a compartir sus pensamientos y sentimientos. Asegúrales que sus ideas son importantes, aunque no siempre estés de acuerdo.

Cómo puedo fomentar la confianza de mi hijo/a: establecer metas

Cuando los niños, niñas y adolescentes establecen metas y trabajan arduamente para conseguirlas, se demuestran a sí mismos que pueden lograrlo.

Por ejemplo, para los niños pequeños, una meta puede ser aprender cómo ponerse los zapatos o calcetines por sí solos. Para los niños mayores puede ser ahorrar para algo que quieren o aprender a tocar un instrumento.

Las metas deben ser desafiantes pero realistas. Trata de elogiar el progreso que hacen a lo largo del camino, no sólo el resultado final.

Cómo ayudar a un niño, niña o adolescente con un diálogo interno negativo

Hazle saber que perder, experimentar dificultades o cometer errores no significa fracasar. Crecer como persona involucra enfrentar nuevos desafíos y los errores forman parte del aprendizaje.

Conversar con los niños, niñas y adolescentes sobre sus emociones puede ayudarles a reconocer cuando están pensando de manera negativa. Si dicen cosas como “Soy terrible en todo”, puede ser porque están decepcionados o porque no obtuvieron lo que querían.

Cuando nosotros experimentamos contratiempos tenemos la oportunidad de aprender de estos. Hazles saber que mejorarán como resultado y recuérdales que estas experiencias pueden ayudarles a sentirse con más confianza para manejar las situaciones difíciles.

Motiva la risa para fomentar la autoestima

Reírse es una manera maravillosa para que niños, niñas y adolescentes expresen sus emociones, se conecten con los demás y se sientan bien consigo mismos.

La siguiente vez que digan un chiste o te cuenten una historia chistosa, trata de prestarles toda tu atención y disfrutar juntos del momento.

Algunas veces, también puede ser de ayuda que te vean reír cuando las cosas salen mal.

Cuando comparten las risas y se divierten juntos, estás formando una conexión positiva y de apoyo donde puede florecer la confianza.

Si una baja autoestima o falta de confianza ha estado impactando la vida cotidiana de tu hijo/a por un periodo de tiempo, habla con un profesional de confianza o busca más consejos.

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